jueves, abril 01, 2010

Silencio

Hay cosas que sólo el silencio puede decir, hay cosas que solo con la pausa de la voz, callado, con la mirada llorosa y un temblor en las manos, cosas que sólo te puedo decir cuando te miro… cuándo te darás cuenta de que te hablo con los ojos, que cada mirada es un te quiero, cada guiño un te necesito, que mi silencio es un no puedo vivir, un te has metido en mi mente destrozando muros y paredes, la pequeña fortaleza que tenía… que mi silencio es la fe, que mis manos sufren porque no te pueden acariciar y mis brazos hace tiempo que se declararon en rebeldía para buscar tu abrazo… que mi silencio es para ti la muestra de que todo está en ti, que mi calor será el tuyo y mi frío será sólo mío… mi silencio… será mi silencio las alas que te ayuden si me dejas, echaré a volar contigo a mis espaldas, no faltará una caricia… no te faltará un beso en la madrugada ni noche estrellada que te arrope en tu desvelo… no te faltará primavera si me dejas amar, no te faltará cariño de palabras (porque si algo tengo son mis letras), los poemas hablados por mi corazón serán para ti, no habrán días de lluvia ni tardes de cama para escapar del mundo porque no habrá mundo del que escapar, si me dejas… pequeña si me dejas haré que el mundo giré más despacio, más rápido, al revés… haré lo que me pidas porque lo que pidas tendrás… si dejas a mi silencio tenerte, poseerte, amarte, adorarte, tendrás el mundo para ti… echa a volar cariño, echa a volar conmigo que no tenerte me duele, que la incertidumbre me mata como un veneno ajeno que me consume, que ver tus labios a distancia es como una daga en mi vientre que se adentra poco a poco en mi carne… si me dejas, pequeña, si dejas a mi silencio explorar tu piel morena y limpia, palmo a palmo, centímetro a centímetro te adoraré como a una diosa griega, mi devoción será como la de Ulises a Penélope, te prometo no escuchar cantos de sirenas, mirar a princesas lejanas porque mi reino está en ti, en tu vientre ardiente, el la luna que tienes en el pecho, incandescente y hermosa, mi lecho estará siempre en tu regazo y mi amor será día a día el regalo más grande que un pobre hombre puede dar, tendrás la riqueza de mi cuerpo en la noche, y mis manos heladas en los días de verano, en tu tristeza yo seré bálsamo para tu alma, y en mi boca tendrás los besos que nunca a nadie di… si me dejas, pequeña, el cielo será siempre cobalto, zafiro o simplemente azul, desterraré al plata por ti y si es necesario desterraré de mi alma al eterno octubre y a su maldito otoño… tan sólo, pequeña, escucha mi silencio, escucha mi silencio, mi silencio… el silencio que tanto, tanto, tanto, tanto, tanto te va a dar

4 comentarios:

Belén dijo...

¡¡¡WOW!!!
Sin palabras..

Daniel Díaz dijo...

Y ya está... no le vas a sacar la puntilla a nada... no me vas a decir nada... de que si el amor esto, el amor lo otro..mmm que raro

Belén dijo...

Arrgg!! decir que mis comentarios son puntillosos, me ofendes, acabas de perderme como lectora incondicional... y no, no tengo más que añadir... por lo demás muy bien, de amor bien,¡gracias!,la semanita q viene de vacaciones y que hace un frio del carajo....en fin, que yo tmb te echo de menos!! :D

Daniel Díaz dijo...

Seguro que mi siguiente post entraras la primera para leerlo... no sé para que dices tonterias...xDDDDDD