lunes, marzo 16, 2009

Una imagen del pasado


Hace poco te volví a sentir, hace muy poco que te volví a ver, no quería escribir sobre ti, no lo mereces, y la mayoría de cosas las detesto porque ya casi no te soporto, soy sincero, no es un delito olvidar y menos olvidarte a ti, pero yo no elijo lo que escribo, mis letras son tan independientes que casi ocupan todo mi ser, son tan libres que me dominan y no tengo más remedio que someterme a ellas, pero no estoy conforme por escribir ni una coma sobre ti.

Te volví a ver, o eso creo, parecías tú ¿o no? Ya casi ni te reconozco, ya casi ni te recuerdo o no te quiero recordar (las gallinas que entran por las que van saliendo). Tenías el pelo cambiado, el castaño te sienta bien, sabes bandida que siempre me gustaron las mujeres de pelo castaño, pero aunque odio a las rubias contigo nunca me importó. No era tu cara, tu rostro estaba cambiado para tan poco tiempo, pero eran tus gestos, esa forma de andar era la tuya, siempre captando mis ojos con tu contoneo serio y desatado al mismo tiempo, me hizo recordar muchas cosas buenas, días en los que creía en otras cosas y pensaba que el amor era diferente, días en los que tu cuerpo era como un templo y mis besos una oración, tiempos en los que el dolor no importaba si tu curabas mis heridas, una época en la que sólo importaba quererse y después llegó la gran oscuridad. Seguías caminando, del brazo de otro por supuesto, pero no me importó. Estornudaste, ese estornudo te delató, supe al instante que eras tú porque esas cosas nunca se olvidan, suena mal, pero al estornudar siempre te ponías preciosa con una belleza increíble y ese día volvió a pasar.

Después seguiste tu camino y yo el mío, no sentí dolor, mi corazón permaneció inmutable y el mundo siguió girando, sólo me trajiste recuerdos de una época que, pese a todo, guardo en una caja con mucho cariño; pero, también hay que decir que después de una gran oscuridad, o mejor dicho, cuando te envuelve una gran oscuridad, si sigues, si caminas hacia delante, si no te anclas y avanzas con todas tus fuerzas al final terminas por encontrar una luz, que será pequeña pero termina por ser muy grande. Ahora mi vida es el Rock and Roll (es coña), ahora mi vida son muchas cosas de las que no tienes idea ni quiero que tengas, cosas que me hacen feliz y ser la persona que no pude ser a tu lado, sólo espero que tú seas también la persona que fuiste una vez y no en quien te convertiste a mi lado, tequila bebe el barquero pequeña.

3 comentarios:

Anónimo dijo...

Ese Fito, que recuerdos trae.Gracias por volver.

Daniel Díaz dijo...

Nunca me he ido

Anónimo dijo...

Buena esta entrada, me ha gustado mucho..pero sal de mi cabeza! jeje